Pues hoy por fin llegó mi visa y literalmente salté y grite de la emoción, jaja. Ahí me ven en la cocina súper emocionada salte y salte con una cara de felicidad innegable y una sonrisa de oreja a oreja.

Ahora sí, ¡me voy! Digo, no es que no me fuera a ir, pero con lo de la visa sí temí un poco que hubiera un error o cualquier cosa y las cosas se retrasaran. Ahora sólo me queda esperar a que llegue el día.

6 días más; seis días y estaré en un avión volando sobre el estrecho de Bering, dirigiéndome hacia el continente asiático para vivir en él todo un año. Todavía no me la creo… Sí, pero no. Estoy consciente de que viviré lejos un buen tiempo, de que tendré otra familia, veré otros panoramas, pero aún no me doy cuenta al 100% de que no veré a mi familia y amigos durante un buen rato. Supongo que ya que esté en Taiwán me daré cuenta y los extrañaré como loca, jaja. Pero sé que ahí seguirán sin importar qué.

Y en otras noticias, ¡conseguí patrocinio de la marca NaCo! Me llevaré una de sus camisetas a Taiwán representando a Tijuana. Qué mejor que con una marca local. Gracias a Rocío Castellanos 🙂

Bueno, me despido porque tengo que terminar de coser los parches a mi blazer! Espero regresar con él lleno de pines y buenos recuerdos.

Buenas noches.